- Lunes, 13 de Junio 2022
Define tu propósito individual y encuentra (el feliz) vínculo con lo que haces en la vida cotidiana
Es importante tener claro cómo en tu vida cotidiana, que incluyen en su mayor parte tus actividades laborales, se vinculan con tu sentido de vida, propósito, misión, roles y prioridades. Larry Page, cofundador de Google destaca que “debes hacer cosas que realmente sean importantes, pero también debes divertirte, porque si no, no tendrás éxito”. Comparto algunas claves que he descubierto para encontrar la felicidad en el trabajo.
Busquemos ser felices en nuestro trabajo, a pesar de las dificultades, pero reflexionemos constantemente sobre nuestro crecimiento”.
La automotivación es lo primero: Durante nuestra vida laboral nos vamos a encontrar con diferentes tipos de jefes y líderes; por tanto, debemos estar listos para recibir esas “palmadas en la espalda” que muchas veces son necesarias, pero también para aquellos largos silencios cuando las cosas salen bien o logramos sobre cumplir nuestros objetivos. Por ello, debemos motivarnos individualmente, celebrarnos y reconocer nuestro esfuerzo y logros. Es una buena práctica hacer un check out al finalizar nuestra jornada, y felicitarnos por lo logrado durante el día, por el valor que hemos aportado, así como recordarnos lo que debemos mejorar mañana.
Practica mucho la empatía y la asertividad: Es importante ponerse en el lugar del otro, entender tanto sus razones como sus emociones y así poder entregar los mensajes correctos de la manera correcta y en el momento adecuado. Esto nos ayuda a vincularnos con todos en la oficina apropiadamente y de manera positiva.
Ser transparente y vivir sin cargos de conciencia: Cuando actuamos haciendo lo que consideramos correcto y justo, cuando actuamos con la verdad y siguiendo los valores y políticas de la organización, podemos siempre dar frente a las dificultades y dudas que se presenten y así sustentar nuestras decisiones y acciones. Recordemos que la confianza se construye todos los días y a través de pequeñas acciones.
Pide y entrega ayuda: Como en casa, también en el trabajo las redes de apoyo y de soporte son necesarias para poder pasar por un proceso eficiente y exitoso, por ello, no dudemos en pedir ayuda, en preguntar lo que no sabemos y en entregar desinteresadamente nuestro apoyo, nuestras ideas, nuestro trabajo a todos aquellos que pensamos lo necesitan. De esta forma no solo generamos valor con la gestión del conocimiento, sino que generamos vínculos emocionales y sociales que son importantes para nuestro desarrollo personal y profesional.
Organiza perfectamente tu tiempo: Lo primero siempre será definir tus roles, objetivos y prioridades. Día por día, es importante hacer un listado de nuestras actividades pendientes, luego de ello establecer las dos o tres prioridades del día (aquello que no podemos dejar pasar) y por último llevar esta información a una agenda de todo el día donde es recomendable incluir los “momentos hormiga”, aquellos que se adueñan de nuestro tiempo en pequeños espacios en los cuales realizamos actividades que no son importantes pero muchas veces necesarias para lograr el equilibrio buscado.
Busquemos ser felices en nuestro trabajo, a pesar de las dificultades, pero reflexionemos constantemente sobre nuestro crecimiento, preguntémonos si estamos siendo mejores, creciendo y desarrollándonos, y estemos seguros que estamos aportando valor a la compañía.
Artículo publicado en Radio Programas del Perú
La profesora Pretell es Master of Business Administration in General and Strategic Management de la Maastricht School of Management, Países Bajos. Asimismo, es Magíster en Administración Estratégica de Empresas de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Bachiller en Economía de la Universidad Ricardo Palma, en el mismo país. Complementando su formación participó en el Colloquium on Participant Centered Learning (CPCL) de la Harvard Business School en Estados Unidos.