- Miercoles, 04 de Mayo 2022
En la reciente mesa de diálogo “Negocios con Impacto Positivo para el Desarrollo del País” que organizamos en Centrum PUCP, con el apoyo del diario Gestión y con la participación de líderes en diferentes materias, quedó claro, como un principio incuestionable, que la empresa es uno de los agentes de cambio social más poderosos con los que contamos.
Nuestro país pasa por una grave situación política, social y económica, generada, principalmente, por el impacto global de un conflicto armado internacional, una pandemia que viene disipándose y la evidente falta de capacidades de nuestra clase política para gestionar el Estado y poder afrontar de la mejor manera, justamente, los estragos de estos factores internacionales. En un escenario como este, los líderes empresariales tenemos un rol fundamental para asegurar las condiciones de desarrollo y sostenibilidad del país.

Hoy debemos asegurar un desarrollo sostenible, esto es que si la empresa crece, su entorno crezca con ella”.
En la reciente mesa de diálogo “Negocios con Impacto Positivo para el Desarrollo del País” que organizamos en Centrum PUCP, con el apoyo del diario Gestión y con la participación de líderes en diferentes materias, quedó claro, como un principio incuestionable, que la empresa es uno de los agentes de cambio social más poderosos con los que contamos. Y los líderes empresariales debemos asumir ese rol con plena responsabilidad. Más aún, en una coyuntura como la que vivimos.
Un segundo principio básico que concluimos en este espacio de análisis fue que las empresas son los actores que cuentan con las herramientas, recursos y capacidades para cambiar las cosas. No hay organización más competente para transformar los riesgos en oportunidades que la empresa.
Para lograrlo debemos terminar de dar ese paso adicional. Podría resumir todos los aportes que hicieron mis colegas en este espacio de discusión académica en una sola idea: que todos los representantes de nuestra clase empresarial establezcamos un solo propósito, el de asegurar el bienestar de todos nuestros grupos de interés.
Hoy debemos asegurar un desarrollo sostenible, esto es que si la empresa crece, su entorno crezca con ella. Es la única manera de garantizar su sostenibilidad, justamente lo que ahora mismo está en riesgo. Debemos asumir que los buenos negocios lo son porque su existencia garantiza un mundo mejor. Y eso no debería ni siquiera estar en discusión. Es hora de que todos, sin excepción, apliquemos este propósito.
Artículo publicado en Diario Gestión.

Es profesor principal de programas de posgrado e investigador principal en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Es miembro del Directorio de la EM Normandie Business School y de ESDES (Francia), así como de otras instituciones peruanas e internacionales de prestigio. Además, es evaluador para acreditaciones EQUIS, AACSB y AMBA. Actualmente, se desempeña como coordinador de Proyectos de Desarrollo Sostenible y RSE para LATAM en la Cátedra UNESCO.