- Viernes, 01 de Enero 2021
Beatrice Avolio Alecchi
Directora del Centro de Liderazgo Socialmente Responsable, Mujer y Equidad de CENTRUM PUCP y Jefa del Departamento Académico de Posgrado en Negocios
Hace mucho tiempo que nos venimos preguntando sobre qué hacer para mejorar el nivel educativo de los peruanos y para alcanzar los dos grandes objetivos esperados: (a) alto nivel de calidad en la enseñanza y (b) cobertura de educación de calidad a toda la población. En este sentido, Centrum PUCP, realizó un estudio Plan Estratégico del Sector Educativo, incluyendo propuestas concretas para siete sectores (preescolar, escolar privado y público, técnico privado y público, pregrado privado y público y postgrado), basado en los siguientes siete pilares de la educación.
Primero, los estudiantes. Para que una persona pueda ser capaz de aprender, debe haber satisfecho primero sus necesidades básicas. Estudiantes con problemas de nutrición y condiciones de vida inadecuadas, tienen menores capacidades de aprender; la educación está necesariamente ligada a la nutrición, a la salud y a las condiciones familiares.
Segundo, los profesores. El profesor es el elemento fundamental
En la educación, responsable de transmitir conocimientos y promover actitudes y valores. Los países que han logrado mayores niveles de educación han invertido mucho en sus docentes, capacitándolos y haciéndolos acreedores a la distinción de ser profesor. Ser profesor en estos países, no es un trabajo, es un honor y una distinción, reconocida por toda la población. Buena infraestructura, buenos métodos de enseñanza pero con profesores mediocres, no permite lograr resultados positivos.
Tercero, los métodos de enseñanza. La innovación permanente en métodos de enseñanza, el cómo transmitir estos conocimientos, generar actitudes y promover valores es un pilar fundamental del proceso educativo.
Cuarto, el contenido. La revisión permanente del contenido educativo, adaptándolo a las necesidades de los sectores productivos.
Quinto, la infraestructura: Aulas, campos deportivos, laboratorios, tecnología, transformación digital.
Sexto, el aseguramiento del aprendizaje. Poco se ha dicho sobre esto. Los sistemas de aseguramiento del aprendizaje buscan garantizar a terceras personas, que “los estudiantes están aprendiendo lo que esperamos que aprendan”. Es un sistema que permite medir y garantizar que se están logrando los resultados esperados.
Séptimo, la cultura educativa. El aprendizaje no se produce únicamente en las aulas y en horario escolar. El aprendizaje es un proceso permanente, que se cultiva en la familia principalmente, y en el tiempo libre de las personas. Si analizamos en qué usan el tiempo libre las familias en el Perú, nos encontramos que ver televisión de baja calidad es una de las principales actividades realizadas. El tiempo dedicado a la lectura, a la investigación, las conversaciones familiares que permiten desarrollar la argumentación y criterio, las visitas a bibliotecas, museos, centros de tecnología, es casi inexistente en nuestra población. Los países con altos niveles de educación, dedican menos horas a la educación en aulas pero los niños y jóvenes se educan en forma permanente en el ambiente familiar y en su tiempo libre. Tal vez este sea el principal reto de la educación en el Perú. La educación no es solo un reto del Estado, debe ser un objetivo de todas las familias peruanas.
ACERCA DE LA AUTORA
Beatrice Avolio
La profesora Avolio es Doctora en Administración de Empresas de la Maastricht School of Management en Países Bajos. Asimismo, es Doctora en Administración Estratégica de Empresas de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Además, cuenta con un Master of Philosophy de la Maastricht School of Management, también en Países Bajos. Igualmente, posee el grado de Magíster en Administración de Empresas de la Escuela de Administración de Negocios para Graduados en Perú. Completando su formación académica, es Licenciada en Administración de Empresas y Licenciada en Contabilidad por la Universidad del Pacífico en Perú.