- Viernes, 04 de Noviembre 2022
● El resultado más débil para Perú se registra en el pilar Tecnología (puesto 57, con 41.3 puntos); mientras que, en los pilares Conocimiento y Preparación para el Futuro se encuentra en los puestos 56 y 54, respectivamente.
● A nivel mundial, Dinamarca desplaza a EE. UU. del primer lugar en el ranking. En tanto, las economías de Asia oriental junto con América del Norte siguen siendo los centros de la innovación digital del mundo.
Según los últimos resultados del Ranking de Competitividad Digital Mundial, elaborado por el Institute of Management Development (IMD) de Suiza, en asociación con Centrum PUCP para el capítulo de Perú, nuestro país se ubica en el puesto 57 de 63 países con un puntaje de 52.1 (en una escala de 0 a 100 puntos).
“En el caso de Perú, se registra un ligero incremento en puntaje (+4.8 puntos), aunque no se traduce en una mejor posición (permanece en puesto 57). Lo cual indica que, el avance no ha sido suficiente para escalar en el ranking”, señaló Luis Del Carpio, director especialista de la Maestría en Gerencia del Desarrollo Competitivo Regional de Centrum PUCP. “En el mundo la tecnología avanza con gran rapidez, por ello los negocios y las personas deben mantenerse a la vanguardia, aprovechando sus beneficios para ser más competitivos. Por ello, es importante evaluar cómo los países se enfrentan a este reto”, agregó Del Carpio.
El resultado para nuestro país es producto de los puntajes alcanzados en los tres pilares que evalúa el ranking: 1) conocimiento, Perú avanza 9.5 puntos (de 36.9 a 46.3 puntos) y sube tres posiciones del puesto 59 al 56; 2) tecnología, el puntaje obtenido es mayor que el registrado el año pasado (+3.3 puntos), pero cae una posición del puesto 58 al 57 siendo el pilar que menor puntaje presente; y 3) preparación para el futuro donde también alcanzó un mayor puntaje (+6.3 puntos), pero no subió posiciones, permaneciendo en el puesto 54.
Al respecto, Luis Del Carpio señala que “viendo los resultados en cada pilar y en cada factor evaluado, es importante enfocarnos en los puntos claves para seguir mejorando en competitividad digital dado que el avance que presenta el Perú no ha sido suficiente para poder escalar más posiciones. Con esta investigación sobre la competitividad digital mundial, Centrum PUCP contribuye con información de alta calidad y gran valor para las personas y empresas, con el fin que sea usado por los agentes generadores de cambio como un instrumento que promueva la competitividad digital en el Perú”.
A nivel mundial, Dinamarca desplaza a EE. UU. del primer lugar
A nivel mundial se mantiene el top five, es decir que, siguen liderando los cinco países de la edición 2021, aunque en un orden distinto. En el primer puesto se ubica Dinamarca con 100 puntos (+4.8 puntos), superando y reemplazando a Estados Unidos que desciende al segundo puesto con 99.8 puntos (-0.2 puntos). En el tercer puesto se encuentra Suecia con 99.8 puntos (+4.6 puntos). Le siguen Singapur y Suiza en el cuarto y quinto puesto, respectivamente. Ambos países registran un mayor puntaje y suben una posición con respecto al año pasado.
De este grupo se resaltan las mejores prácticas que sirven como guía para todos los países para mejorar en competitividad digital. Entre las características que estos países tienen en común están: el uso eficiente del talento digital; una adecuada infraestructura tecnológica, lo cual facilita el uso de la tecnología disponible y crear nuevas; y marcos de regulación efectivos que se adaptan a nuevas tecnologías con alta velocidad.
Por otro lado, la clasificación de competitividad digital de las economías de Asia oriental (China, Hong Kong, Japón, Corea del Sur y Taiwán) cae dos posiciones en promedio, del puesto 13 al 15, lo que marca el punto final de la tendencia positiva que comenzó en 2018. Asimismo, las economías de Asia oriental junto con América del Norte siguen siendo los centros de la innovación digital del mundo. Mientras que, Europa occidental sufre aquí un declive.
En la región, Chile lidera, pero países siguen rezagados a últimas posiciones
La situación en la región no es favorable. La mayoría de los países latinoamericanos aún no recuperan los puntajes registrados antes de la pandemia, encontrándose en posiciones al final del ranking.
“La falta de recursos para apoyar el talento y el desarrollo tecnológico se convierten en los principales obstáculos para que los países de la región mejoren con respecto a la generación de conocimiento y sean capaces de aprovechar la transformación digital al máximo”, comentó Luis Del Carpio de Centrum PUCP.
Del grupo, Chile sigue siendo el líder con 66.2 puntos, pero cae dos posiciones y se ubica en el puesto 41. De igual manera, Brasil cae una posición, a pesar de mejorar en puntaje (+4.7 puntos). Colombia, que desciende al puesto 60, una posición inferior que el año pasado, también mejora en puntaje (+3.8 puntos).
Por otro lado, los países que sí registran mejoras en posición son: México, que escala una posición (del puesto 56 al 55), registrando 54.7 puntos (+6 puntos); Argentina, que sube dos posiciones y registra 6.6 puntos más que el año pasado.
Si analizamos las posiciones obtenidas por los países de la región desde 2013, se observa que todos presentan una tendencia negativa. Los puntajes son inferiores a los registrados en años anteriores a la pandemia (2020).
Sobre el ranking de Competitividad Digital Mundial
En primer lugar, el objetivo de este índice es medir y evaluar la capacidad que tienen 63 países para adoptar y explorar tecnologías digitales como un motor clave para la transformación económica en los negocios, el gobierno y la sociedad en su conjunto. En ese sentido, la competitividad digital es evaluada a partir de tres pilares: (1) Conocimiento, (2) Tecnología y (3) Preparación para el Futuro.
Sobre Centrum Think
Centrum Think de Centrum PUCP está integrado por un equipo de personas dedicadas a la investigación académica, generadoras de conocimiento, propuestas y soluciones concernidas con el desarrollo del país y la región, desde una perspectiva global. Tiene el compromiso de generar un impacto positivo en la calidad de vida de las personas, la productividad de las empresas y las decisiones de política pública.