- Viernes, 08 de Abril 2022
La expresión del descontento popular requiere de medidas urgentes lideradas por una persona que inspire confianza y apertura al diálogo
Tras una segunda moción de vacancia, el presidente Castillo se ha, una vez más, escapado de lo que parece una crónica anunciada. En un contexto político con un Congreso cuyo apoyo se ha ido reduciendo, el presidente sigue cometiendo el error de aislarse cada vez más y con ello acumular puntos de desaprobación popular. Sin embargo, repite el error de creer en fantasmas políticos que buscan su destitución y orquestan huelgas y marchas en su contra, cuando es la misma voz del pueblo quien demanda soluciones frente al alza en los precios de combustibles, alimentos y fertilizantes.
Parte de la solución es la comunicación directa”.
Frente al paro de transportistas, los comentarios desatinados que culpan las malas intenciones detrás del paro promovido por personas a las que las ganancias por su trabajo pierden poder adquisitivo han contribuido a desatar una crisis social que hunde al país en una serie de actos violentos y desorden social. Sin embargo, la solución no se encuentra en los subsidios de bienes ni en el aumento salarial, medidas que solo podrían funcionar parcialmente, de manera no inmediata y poco sostenibles en la situación actual. Estas medidas, además, promoverían aún más la creación de informalidad. Muy por el contrario, un acercamiento hacia alguna solución solo se puede encontrar en la comunicación directa y el entendimiento de las necesidades de aquellos que participan de las huelgas y de aquellos que no necesariamente salen a protestar, pero que también forman parte del descontento. La paralización que se vive es la consecuencia de una informalidad ignorada en el sector de transportes, que ha crecido de manera desmesurada y en el que está involucrado un sector de la población que vive de sus ingresos diarios.
La expresión del descontento popular requiere de medidas urgentes lideradas por una persona que inspire confianza y apertura al diálogo. Y aunque los problemas son el resultado de hechos acumulativos, sigue siendo uno que requiere de un liderazgo con el que ahora no contamos y que necesitamos. Mantengámonos unidos en estos momentos tan difíciles que atraviesa nuestro país.
Artículo publicado en Diario Gestión. Descarga aquí
Es Doctor en Administración de Empresas de la prestigiosa Maastricht School of Management en los Países Bajos. Además, obtuvo el título de Doctor en Administración Estratégica de Empresas de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Asimismo, cuenta con un Master of Philosophy de la Maastricht School of Management de Países Bajos. A nivel de posgrado, ha completado un Magíster en Administración de Empresas en la Universidad del Pacífico en Perú, y es Licenciado en Economía por la misma universidad, lo que le brinda una perspectiva amplia y sólida en términos económicos y de gestión empresarial. Además, ha participado en programas de desarrollo ejecutivo de renombre, como el Executive Development Program de la Escuela de Negocios de Wharton en Estados Unidos y el Business Leadership Program de la Fundación Getulio Vargas en Brasil. Además, ha realizado estudios de especialización en el Banco Mundial, el PNUD y Wilson Learning, Asimismo, participó en el Colloquium on Participant Centered Learning (Programa CPCL) del Harvard Business School en Estados Unidos.